La escuela de psicología humanista surge como una respuesta a las teorías predominantes en la psicología de la primera mitad del siglo XX, tales como el conductismo y el psicoanálisis, las cuales enfatizaban el estudio de los comportamientos observables y los procesos inconscientes, respectivamente. La psicología humanista, por otro lado, pone el énfasis en la experiencia subjetiva del individuo, su potencial para el crecimiento y la autorrealización, y la importancia de la interacción humana.
En este artículo, se explorará la historia y los principios fundamentales de la escuela de psicología humanista, desde sus orígenes en las décadas de 1950 y 1960, hasta su influencia en la psicoterapia y la educación en la actualidad. Se examinarán las figuras clave de la corriente humanista, como Carl Rogers y Abraham Maslow, y se describirán algunas de sus teorías y métodos, como la terapia centrada en el cliente y la jerarquía de necesidades de Maslow.
También se discutirán las críticas y controversias que han surgido en torno a la psicología humanista, tales como su falta de rigurosidad científica y su supuesto énfasis excesivo en el individualismo. Finalmente, se reflexionará sobre la relevancia de la psicología humanista en la actualidad, en un mundo cada vez más complejo y diverso, y se destacarán algunas de sus contribuciones más importantes al entendimiento de la naturaleza humana y el bienestar psicológico.
- Historia
- Fundamentos teóricos
- Figuras claves
- Teorias y métodos
- Críticas y controversias
- Relevancia en la actualidad
- Bibliografía recomendada
Historia
La escuela de psicología humanista surgió como una respuesta crítica a las teorías predominantes en la psicología de la primera mitad del siglo XX, como el conductismo y el psicoanálisis, que se centraban en los procesos observables o inconscientes, respectivamente, y no prestaban atención a la experiencia subjetiva del individuo.
Los orígenes de la psicología humanista se sitúan en la década de 1950, con la obra del psicólogo estadounidense Carl Rogers y su enfoque centrado en el cliente. Rogers creía que el terapeuta debía brindar una atmósfera cálida y no-juzgadora, en la que el paciente pudiera expresarse libremente y encontrar soluciones a sus propios problemas.
En la década de 1960, el psicólogo Abraham Maslow propuso su teoría de la jerarquía de necesidades, que establecía que los seres humanos tienen una serie de necesidades que van desde las más básicas, como la alimentación y el refugio, hasta las más elevadas, como la autorrealización y la trascendencia. Maslow consideraba que las personas buscan satisfacer sus necesidades en un orden específico y que el logro de necesidades superiores era el objetivo último de la vida.
En la década de 1970, la psicología humanista se consolidó como una corriente de pensamiento reconocida y establecida, con la creación de la Association for Humanistic Psychology. A partir de ese momento, se desarrollaron distintas vertientes dentro de la psicología humanista, como la psicología existencial de Rollo May y la teoría del campo de Kurt Lewin.
A pesar de su influencia en la psicoterapia y la educación, la psicología humanista ha sido objeto de críticas y controversias, como su falta de rigurosidad científica y su supuesto énfasis excesivo en el individualismo. No obstante, la escuela humanista ha seguido evolucionando y adaptándose a los desafíos del mundo actual, con nuevas teorías y prácticas que buscan integrar los avances científicos y tecnológicos con el respeto por la dignidad y la libertad del ser humano.
Fundamentos teóricos
La psicología humanista es una corriente de pensamiento que se centra en la experiencia subjetiva del individuo y en su potencial de crecimiento y autorrealización. Algunos de los principios fundamentales de la psicología humanista son los siguientes:
- Enfoque en la experiencia subjetiva: La psicología humanista se preocupa por comprender la experiencia subjetiva del individuo, es decir, sus pensamientos, sentimientos y percepciones. La subjetividad se considera una fuente valiosa de información sobre la vida y el mundo, y se considera que cada persona es única e irrepetible.
- Potencial de crecimiento y autorrealización: La psicología humanista cree que cada ser humano tiene un potencial innato para crecer y desarrollarse. Se considera que las personas tienen un impulso natural hacia la autorrealización, es decir, hacia el desarrollo de su propio potencial y la realización de su verdadero yo.
- Importancia de la interacción humana: La psicología humanista enfatiza la importancia de las relaciones interpersonales y la interacción humana. Se considera que el contacto y la comunicación con otras personas son necesarios para el desarrollo y el bienestar emocional.
- Valoración positiva de la persona: La psicología humanista parte de la premisa de que todas las personas tienen valor y dignidad intrínsecos, independientemente de sus circunstancias o logros. Se busca valorar y fomentar el crecimiento y la realización de cada persona, sin juzgar o evaluar.
- Enfoque holístico: La psicología humanista se enfoca en la persona como un todo, incluyendo sus dimensiones físicas, emocionales, sociales, espirituales y cognitivas. Se considera que todos estos aspectos están interconectados y que es necesario abordarlos de manera integrada para comprender la experiencia humana de manera completa.
En resumen, la psicología humanista se preocupa por comprender la experiencia subjetiva del individuo, su potencial de crecimiento y autorrealización, la importancia de las relaciones interpersonales, la valoración positiva de la persona y el enfoque holístico en el ser humano como un todo. Estos principios fundamentales han sido la base para el desarrollo de distintas teorías, métodos y prácticas en la psicología humanista.
Figuras claves
La psicología humanista ha tenido muchas figuras claves a lo largo de su historia, cuyas teorías y prácticas han sido fundamentales en el desarrollo y difusión de esta corriente de pensamiento. Algunas de las figuras más destacadas de la corriente humanista son las siguientes:
- Carl Rogers: Carl Rogers es considerado el fundador de la psicología humanista. Su teoría de la personalidad se basa en el concepto de la auto-actualización, es decir, en el potencial de cada persona para desarrollar su verdadero yo y encontrar la realización personal. Rogers desarrolló la terapia centrada en la persona, que se enfoca en la comprensión y el respeto de la experiencia subjetiva del cliente, y en su capacidad de autorrealización.
- Abraham Maslow: Abraham Maslow fue otro de los precursores de la psicología humanista. Es conocido por su teoría de la jerarquía de las necesidades, que describe cómo las personas buscan satisfacer sus necesidades básicas, como el alimento y la seguridad, para luego buscar la autorrealización y el desarrollo personal. Maslow también enfatizó la importancia de la educación humanista y la creatividad en la autorrealización.
- Rollo May: Rollo May es otro de los representantes destacados de la psicología humanista. Es conocido por su enfoque en la ansiedad y la libertad, y su interés en la filosofía y la literatura. May propuso la terapia existencial, que se enfoca en la exploración de la vida y el sentido de la existencia, y en el desarrollo de la responsabilidad personal y la libertad.
- Erich Fromm: Erich Fromm fue un psicoanalista que se interesó en los aspectos sociales y culturales de la psicología. Su teoría se enfoca en la necesidad de los individuos de ser aceptados y valorados por la sociedad, y en la búsqueda de la libertad y la autonomía. Fromm también desarrolló la idea del amor como una experiencia y una actitud esencial para el desarrollo humano.
Estas figuras claves de la psicología humanista han realizado importantes contribuciones a la disciplina, enfocándose en la experiencia subjetiva del individuo, su potencial de crecimiento y autorrealización, la importancia de las relaciones interpersonales, la valoración positiva de la persona y el enfoque holístico en el ser humano como un todo. Sus teorías y prácticas han sido fundamentales en la construcción de la psicología humanista como una corriente de pensamiento única y valiosa.
Además de las figuras que ya se han mencionado, hay otros psicólogos y pensadores que han hecho importantes contribuciones a la psicología humanista:
- Clark Moustakas: Moustakas es conocido por su enfoque fenomenológico en la psicoterapia y en la investigación cualitativa en psicología. Su trabajo se centra en la exploración de la experiencia subjetiva del individuo, y su teoría de la autorrealización destaca la importancia de la creatividad y la expresión personal.
- James Bugental: Bugental fue un psicólogo clínico que se interesó en el estudio de la experiencia humana y en el desarrollo de la terapia existencial-humanista. Sus teorías se enfocan en la importancia del desarrollo de la conciencia y la responsabilidad personal, y en la necesidad de encontrar un sentido y propósito en la vida.
- Viktor Frankl: Frankl fue un psiquiatra y sobreviviente del Holocausto que se interesó en el estudio de la existencia humana y en la búsqueda de sentido en la vida. Su teoría del logoterapia se enfoca en la búsqueda del propósito y significado personal, y en la importancia de la responsabilidad y la libertad para la autorrealización.
- Abraham H. Maslow: Aunque ya se ha mencionado a Maslow, es importante destacar que sus ideas y teorías sobre la jerarquía de necesidades han sido ampliamente influyentes en la psicología humanista, así como su interés en la educación humanista y la creatividad.
Teorías y métodos
La psicología humanista ha desarrollado diversas teorías y métodos que se enfocan en la experiencia subjetiva del individuo, su potencial de crecimiento y autorrealización, la importancia de las relaciones interpersonales, la valoración positiva de la persona y el enfoque holístico en el ser humano como un todo. Algunos de los más importantes son:
- Terapia centrada en el cliente: Desarrollada por Carl Rogers, esta forma de terapia se enfoca en la experiencia subjetiva del cliente y en la relación terapéutica como un medio para la autorrealización y el crecimiento personal. La terapia centrada en el cliente se basa en tres condiciones terapéuticas esenciales: empatía, aceptación incondicional y congruencia, y se enfoca en ayudar al cliente a desarrollar su potencial de crecimiento y autorrealización a través de su propia experiencia.
- Jerarquía de necesidades de Maslow: Esta teoría de Abraham Maslow se enfoca en las necesidades humanas y su importancia en la autorrealización. La jerarquía de necesidades de Maslow se compone de cinco niveles: necesidades fisiológicas, de seguridad, de amor y pertenencia, de estima y de autorrealización. Según Maslow, cada nivel debe ser satisfecho antes de poder avanzar al siguiente nivel.
- Teoría del self de Rogers: Carl Rogers desarrolló la teoría del self, que se enfoca en la experiencia subjetiva del individuo y en la importancia de la congruencia entre la experiencia y el self ideal. Según Rogers, la autorrealización se alcanza a través de la congruencia entre la experiencia del individuo y su self ideal, y la terapia se enfoca en ayudar al individuo a desarrollar una mayor conciencia de su experiencia subjetiva y a acercarse a su self ideal.
- Terapia Gestalt: Esta forma de terapia se enfoca en la experiencia presente del individuo y en la importancia de la autorregulación y la autodirección. La terapia Gestalt se basa en la teoría de la Gestalt, que se enfoca en la percepción, la organización y la integración de la experiencia, y se enfoca en ayudar al individuo a desarrollar una mayor conciencia de su experiencia presente y a tomar responsabilidad por su propia autorrealización.
La psicología humanista también ha desarrollado métodos y técnicas como la meditación, el diálogo interno, el arte-terapia, el movimiento de encuentro, entre otros, que se enfocan en la experiencia subjetiva, la creatividad y la expresión personal como medios para el crecimiento y la autorrealización. Todos estos métodos y teorías se enfocan en la valoración positiva de la persona y en el enfoque holístico del ser humano como un todo.